Crónicas de un tiroteo anunciado

Un 4 de Septiembre del 2010 DC, a las 21:00hs dos amigas se disponían a comenzar su noche de Sábado comprando comida hecha y alquilando una buena película. Desconociendo lo que les sucedería aquella trágica noche, continuaron su rumbo hacia la casa de una de ellas ubicada en un barrio residencial de su tan
"tranquila" ciudad. Entraron el auto, cerraron el portón e ingresaron a la casa. Saborearon su alimento como si fuera su última cena, se pusieron al tanto, criticando principalmente a sus hombres, y luego se dispusieron a solicitar por teléfono un cuarto de kilo de Helado (para cada una de ellas) de una prestigiosa heladería de su ciudad. Ya eran aproximadamente las 23:30hs cuando ambas yacían en sofás dispuestos cómodamente alrededor de una televisión plana en la cual más tarde, al llegar el helado, verían su tan ansiada película alquilada. De repente, una de ellas, la habitante de dicha casa, le dijo a su amiga: ¿Escuchastes eso? fue un tiro... y su amiga inocente respondió: no! que va a ser un tiro justo paso un auto... no había terminado de decir dicha frase cuando ella misma con sus propios oídos escuchó dos tiros seguidos de ruidos de autos al estilo las persecuciones de la película el Transportador...enseguida, como un rayo despegose ambas del sofá y dirijiose al lugar más seguro de la casa, donde según ellas no llegaría ninguna bala...rápidamente la amiga habitante de dicha casa en un acto de extrema valentía tomó el teléfono que continuaba en el living cerca del sofá donde habían yacido sus cuerpos esperando ansiosamente aquel helado, y marcó el número de su vecina de enfrente; la misma le solicitó que cierre las persianas de las habitaciones y que se mantenga en el lugar más
seguro. Al decir esto las amigas cerraron las persianas y pudieron observar a la policía y a una camioneta a la cual había logrado detener en una calle sin salida ubicada a metros del garage a donde hacia pocas horas habían guardado el automóvil. Fue entonces cuando recordaron que habían llamado al delivery solicitando Helado, por lo que llamaron pidiendo que atrasaran la entrega,ya que había un tiroteo, pero el hombre actuando valientemente decidió llevar la entrega a domicilio sin temor alguno. El helado llegó y las amigas temblando de miedo le abrieron a aquel valeroso hombre y recibieron su helado. Cuando se marchó aquel hombre ambas guardaron el helado en el freezer temiendo que este se derritiera ya que temían que alguno de los delincuentes que se hubieran escapado hubieran entrado a la casa de alguna forma. La vecina continuó llamando una y otra vez contando relatos de lo que había sucedido, habían asaltado en su propia casa al
joyero más importante de esa "tranquila" ciudad que vivía cerca de la casa en donde se encontraban las jóvenes.
Más tarde cuando la policía continuaba rondando el barrio en búsqueda de 2 de los 4 delincuentes, las amigas se dispusieron a comer el helado y mirar la película, que gracias a dios no era de terror ni de acción. Ya demasiado habían tenido con su propia película vivenciada en carne propia.